Nota: "Escuchar, mirar y jugar"

MEDIO: Revista Games Tribune (España), número de Octubre 2011
FECHA: Septiembre 2011
Descargar revista
01
02

Escuchar, mirar y jugar

Este mes, usamos el nuevo servicio de Google a como dé lugar, probamos el sistema de streaming legal que desbarrancó de su podio a Blockbuster y nos divertimos jugando con la versión nac & pop del Guitar Hero.

UNO
Jamás quedaremos afuera de nada, de eso seguro. Llegó Google Music y, todavía, no está disponible en Latinoamérica. Hecha la ley, hecha la trampa. Para quienes quieran utilizarlo, y aquí va un tip maravilloso, más de pícaro que de pirata, pueden registrarse con el zip code de California, el 90210, ¿recuerdan Beverly Hills 90210, no?, bueno, era por eso, 90210 es el código postal de California, una de las zonas que sí acepta Google Music. Lo dicho: queremos pertenecer a todo con simultaneidad, sin desfaces de tiempos. Esta aplicación tiene su correlato en el concepto de “la nube”, donde se dejó de guardar toda la información en las PC y desde ahora, desde hace algún tiempo en realidad, pueden tener sus archivos alojados en Internet. En lugar de tener gigas ocupados, podrán hospedarlos en el ciberespacio, en algún lugar intangible. Así, Google provee de una herramienta que se añade al navegador y scanea tu música, archivos y demás y te lo sube. Fácil y simple. Acepta un número tremendamente avasallador: 20.000 canciones y no pregunta si son legales, ni ilegales, ni nada por el estilo. Suben la música y la escuchan desde cualquier aparato con acceso a Internet e, incluso, esta plataforma también es apta para teléfonos o dispositivos que tengan Android. Este es un paso definitivo hacia los “contenidos absolutos” en “la nube”, como aquellas computadoras con Chrome como sistema operativo –sí, leyeron bien, sin desktop ni nada más que un Chrome-. Navegadores que llevan directamente a “la nube” y de ahí el acceso a Internet y a todos los archivos allí colgados. El postulado de Dropbox, aquellos discos rígidos virtuales en “la nube”, superados por Google y el mundo, ahora sí, cada vez más rendido ante la monarquía del gigante de Internet. ¿Y si un día deciden llevarse todos nuestros archivos y mandarse a mudar? Bueno, nos quedará el recuerdo del al menos lo intentamos y en California estarán, como siempre, felices por ello.

DOS
Vino Netflix a la Argentina y, según parece, la cultura de consumo volverá a mutar. Es que la vida, desde el punto de vista de la biología, implica la capacidad de nacer, crecer, reproducirse y morir, y, a lo largo de sucesivas generaciones, evolucionar. Ese mismo concepto puede ser aplicado a la tecnología y, aún así, también tendría su correlato darwinista. Resulta que prácticamente junto con la noticia de tal advenimiento resuenan los ecos de una baja sensible: en los Estados Unidos, Netflix perdió un millón de abonados –de los 23 millones de suscriptores vigentes- y sus acciones cayeron 26% en dos días. A la sazón, escuché a un amigo una frase que sintetiza el estado actual de los video on demand universales: “Por el momento, ningún servicio de películas online ofrece un catálogo igual que el de los videoclubes grandes de los 80s”. Por lo visto, aunque les parezca absurdo a las nuevas generaciones, las nostalgias de formato todavía prestan batalla bajo alguna forma, sensación, concepto o sentimiento. Es que como usuario del servicio, Netflix no puede dejar de hacerme recordar aquel maravilloso video de X-Press 2 con David Byrne, “Lazy”, cuyas imágenes anticipaban a la sociedad del futuro que mostrara posterior y tan perfectamente Pixar en su clásico inmediato Wall-E, cuya letra, también brillante, decía así: I'm lazy when I'm lovin', I'm lazy when I play; I'm lazy with my girlfriend a thousand times a day; I'm lazy when I'm speaking, I'm lazy when I walk; I'm lazy when I'm dancin' and I'm lazy when I talk. El confort se hace binario y el entretenimiento, borgeano. “Fácilmente aceptamos la realidad, acaso porque intuimos que nada es real”, dijo el maestro Jorge Luis Borges en El Aleph y ya nada será igual. Como aquel VHS que me mira desde su anaquel cómo escribo esta nota y parece decirme: “pero flaco, acá estoy, meteme en la videocassetera”. Y un día, Internet hizo que todo y todos seamos efímeros.

TRES
Hay una buena nueva en el mundo gamer latinoamericano. Ahora, el Guitar Hero y el Rock Band tienen su versión argentina para PC, con producción totalmente doméstica y hits del Rock Nacional Contemporáneo. Éste, El Rock de Tu Vida, nombre que alude en una leve variación de El Rock de Mi Vida, primer disco en vivo de la banda local Guasones, fue desarrollado íntegramente en la Argentina, con técnicos, músicos y jugadores criollos. Contiene, de movida, un repertorio con 18 canciones –con temas de Massacre hasta Los Cafres, y desde Rata Blanca hasta los Auténticos Decadentes-, en guitarra, bajo, voz y/o batería, bajo tres diferentes niveles de dificultad y con la posibilidad de conectarse en red para sumar puntos, ganar nuevas canciones, productos varios e, incluso, entradas para shows. Además, se podrán adquirir nuevas canciones utilizando SMS de la red Movistar, entre otros variados métodos de pago. El Rock de Tu Vida es una especie de franquicia sin necesidad de permisos, ya que los modos de juego, en general, no se patentan como propiedad intelectual. Cabe aclarar que El Rock de Tu Vida no es sólo un mero game: es, sino, una plataforma de entretenimiento social completa que permite formar parte de una comunidad de jugadores, subir puntajes, exhibir destreza e intentar ser la mayor estrella de rock del mundo. Para obtener más información, probarlo o resolver curiosidades, visitar: http://www.elrockdetuvida.com/website/

Hernán Panessi
Corresponsal GTM
Sudamérica (BBAA)
@HernanPanessi

0 comentarios:

Publicar un comentario